El Reiki Usui Tibetano es una técnica creada por el japonés Mikao Usui, que descubrió una energía vital universal que sirve para equilibrar el organismo, tanto en el aspecto físico, como el espiritual y el mental. Esta técnica de imposición de manos se basa en las creencias del budismo, pero también en la del cristianismo, ya que su fundador pensaba que tanto Jesús como Buda curaban a los enfermos con una técnica similar a ésta.
El reiki dictamina que, si la mente está sana, el cuerpo sanará. El reiki se basa en cinco principios: solo por hoy no te enfades; solo por hoy no te preocupes; solo por hoy sé agradecido y amable con todos; solo por hoy trata con respeto a todo ser viviente y solo por hoy trabaja sobre ti mismo. Canalizando la energía universal se pueden mejorar muchos aspectos de nuestra salud tanto física como emocional. El reiki actúa en la salud física porque las posiciones de las manos en este tratamiento se corresponden con los puntos de acupuntura y con el sistema endocrino glandular, además de con los siete centros de energía vital que posee el ser humano, llamados chakras. El reiki también nos ayuda a mejorar nuestra autoestima e incluso a lograr la paz interior.