El reiki egipcio es una técnica relativamente reciente, que fue descubierta y desarrollada por el estadounidense Patrick Zeigler, que viajó a Egipto en 1980 y permaneció una noche en la cámara mortuoria de la Gran Pirámide, lugar en el que recibió una revelación que comprendería solamente tiempo más tarde. Al volver a EEUU, Zeigler se inició en el reiki usui y asocia su revelación con esta técnica, sabiendo en ese instante que ha de desarrollar el Reiki egipcio.
El reiki egipcio es una mezcla entre el reiki usui y la técnica de curación egipcia conocida como seichim. Se conoce como Seichim Seikhem Reiki (SKHM) y es una síntesis de las técnicas de curación de origen budista y las antiguas formas de sanación egipcias. Ambas, consistentes en la imposición de manos, están basadas en la imposición de manos, por las que se canaliza una energía universal beneficiosa para nuestro organismo. Con el reiki egipcio, esta energía consigue alinearnos con el Gran Sol Central, así como con las Geometrías Sagradas. El reiki egipcio sirve para mejorar la autoestima, encontrar la paz interior, facilitar la relajación, aclarar la mente y reconciliarnos con el universo y con la misión que tenemos en él.