La reflexología podal es, quizás, la técnica de reflexología más aplicada en la actualidad, pues la cómoda para el paciente. Como la reflexología facial, nació hace siglos en varios continentes al mismo tiempo, pero la que ha llegado hasta nosotros es la que se originó en China. La medicina china dice que lo que afecta a una parte del cuerpo tiene su reflejo en las demás, pues todos los sistemas del organismo humano están conectados. Por ello, si se presionan los puntos adecuados de los pies, se notará la mejoría que proporciona la energía liberada por esta presión en otras partes del cuerpo. Los reflexólogos indican que ciertos puntos del pies se vuelven más sensibles cuando hay una enfermedad en otro punto del cuerpo. El aumento del dolor de pies indica la presencia de la dolencia y el masaje en dichos puntos la alivia.
Esta técnica terapéutica se utiliza en adultos pero también es muy efectiva en niños e incluso en bebés. Los principales beneficios de aplicar esta técnica es la mejora en casos de dolor en el cuello, malestar menstrual, asma, dolor de espalda, estreñimiento, gastritis o cefaleas.