La Programación Neurolingüística es una técnica relativamente reciente, que se desarrolló a finales del siglo pasado en Estados Unidos gracias a los esfuerzos conjuntos de un psicólogo lingüista y un informático, que descubrieron que, muchas veces, las personas nos atenemos a unos patrones de conducta de los que no nos salimos en ningún caso y eso puede causarnos problemas en nuestro comportamiento.
La Programación Neurolingüística pretende educar a los pacientes en la autoconciencia, así como en la comunicación efectiva, y llegar a cambiar con su tratamiento sus modelos de conducta mental y emocional. Esta terapia estudia nuestros patrones mentales y nos permite conocer los procesos mentales que usamos para codificar información, y por lo tanto nuestra forma de pensar y de actuar. Los beneficios de la PNL son, entre otros, el cambio en conductas que nos bloquean, la percepción más clara de nosotros mismos y de los demás, un mejor manejo del lenguaje, tanto exterior como interior, y la presentación de opciones que nos ayudan a mejorar nuestra calidad de vida, gracias al estudio de nuestras experiencias, y que así podamos mejorar nuestra relación con los que nos rodean, nuestro control de las emociones, y nuestra salud física y mental en general.